Tegucigalpa, MDC, Honduras.
Plan Trifinio como un ente gestor del desarrollo de la región junto a la Fundación Hanns R. Neumann presentaron los resultados sobre el proyecto Generación donde se trabajó con más de 1500 jóvenes de la Región Trifinio, fortaleciendo sus capacidades y construyendo planes de vida y emprendimientos.
El Programa Generaciones va dirigido a los jóvenes de familias de pequeños caficultores de la región, considerándolos actores claves en el proceso del desarrollo local, pudiéndose ser un modelo adoptado en otros ámbitos de oportunidad laboral y en otras comunidades rurales.
Generaciones considera a los jóvenes como actores claves del desarrollo rural, y como parte de la metodología desarrolla espacios formativos en cada comunidad caficultora (Centros de Formación Integral – CEFI) donde se ofrece orientación vocacional, fortalecimiento de habilidades para la vida, formación técnica y para el desarrollo emprendedor y apoyo para su inserción laboral o el autoempleo. Durante todo el proceso, se promueve y fortalece el liderazgo y empoderamiento de los jóvenes en áreas rurales, aspecto innovador de este proyecto.
El proyecto también busca dar respuesta al limitado acceso que tienen los jóvenes a educación, empleo y desarrollo emprendedor en la región, lo cual resulta en la migración a la ciudad o al extranjero.
“Hoy el 70% de estos jóvenes ya no piensan en emigrar, algunos se reinsertaron en el sistema educativo, otros hicieron su propio empredimiento y otros trabajan ya en sector privado, el éxito de este proyecto nos lleva a pensar en elevarlo a política pública o replicarlo en otras regiones del país, manifestó el Director Ejecutivo Nacional del Plan Trifinio por Honduras, Cristian Acosta”.
La Fundación Hanns R. Neumann Stiftung, como plataforma de la industria del café, ha apostado a la juventud en áreas cafetaleras. Para ello ha creado el programa Generaciones como respuesta a la falta de empleo y migración juvenil, especialmente en comunidades de la Región Trifinio, la zona fronteriza entre Honduras, Guatemala y El Salvador. En esta región fronteriza trinacional, la agricultura y en especial el café juega un papel importante en la economía, generando cerca del 70% del ingreso a nivel local. Los bajos precios del café, el poco acceso a crédito y asistencia técnica tornan más difícil la inversión y el acceso a mercado, impactando así la productividad y rentabilidad de las fincas. Con un alto nivel de pobreza, pocas oportunidades de empleo y un futuro incierto en el café, muchos jóvenes están migrando a zonas urbanas o al extranjero en busca de mejores oportunidades.